LA DISCIPLINA DEL SEÑOR

(Hebreos 12:5-11) Y habéis ya olvidado la exhortación que se os dirige como a hijos? Hijo mío, no tengas en poco la disciplina del Señor ni desmayes cuando seas reprendido por él. Porque el Señor disciplina al que ama y castiga a todo el que recibe como hijo. Permaneced bajo la disciplina; Dios os está tratando como a hijos. Porque, ¿qué hijo es aquel a quien su padre no disciplina? Pero si estáis sin la disciplina de la cual todos han sido participantes, entonces sois ilegítimos, y no hijos. Además, teníamos a nuestros padres carnales que nos disciplinaban y les respetábamos. ¿No obedeceremos con mayor razón al Padre de los espíritus, y viviremos? Ellos nos disciplinaban por pocos días como a ellos les parecía, mientras que él nos disciplina para bien, a fin de que participemos de su santidad. Al momento, ninguna disciplina parece ser causa de gozo, sino de tristeza; pero después da fruto apacible de justicia a los que por medio de ella han sido ejercitados.

Todas las familias necesítan disciplina. También la necesita la Familia de Dios. La palabra "discípulo," y la palabra "disciplina," se relacionan. Cada discípulo de Jesús necesita disciplina. El propósito de la disciplina, o castigo, es positivo. Debería ser diseñada siempre para ayudar y no impedir. (Véase 2 Corintios 10:8; 13:18 etc.)

He aquí algunas Escrituras para su consideración.

CUANDO ALGUIEN PECA CONTRA USTED

(Mateo 18:15 -17) Por tanto, si tu hermano peca contra ti, vé, amonéstale a solas entre tú y él. Si él te escucha, has ganado a tu hermano. Pero si no escucha, toma aún contigo uno o dos, para que todo asunto conste según la boca de dos o tres testigos. Y si él no les hace caso a ellos, dilo a la iglesia; y si no hace caso a la iglesia, tenlo por gentil y publicano.

CUANDO ALGUIEN EN LA IGLESIA COMETE FORNICACION

¨Fornicación¨ es una palabra general que se refiere a cualquier tipo de inmoralidad sexual. He aquí las instrucciones de Pablo en cuanto a un fornicador en la Iglesia de Cornito.

Porque a los que están fuera, Dios juzgará. Quitad, pues, a ese perverso de entre vosotros. (1 Corintios 5:13)

(1 Corintios 5:1-13) Ciertamente, se oye que hay entre vosotros inmoralidad sexual, y una inmoralidad tal como ni aun entre los gentiles se tolera; tanto, que hay quien tiene la esposa de su padre. ¡Y vosotros estáis inflados de soberbia! ¿No habría sido preferible llorar, para que el que ha cometido semejante acción fuera expulsado de entre vosotros? Aunque por cierto estoy ausente en el cuerpo, estoy presente en el espíritu. Ya he juzgado, tal como si estuviera presente, a aquel que ha hecho semejante cosa. En el nombre de nuestro Señor Jesús, reunidos vosotros y mi espíritu con el poder de nuestro Señor Jesús, entregad al tal a Satanás para la destrucción de la carne, a fin de que su espíritu sea salvo en el día del Señor. Vuestra jactancia no es buena. ¿No sabéis que un poco de levadura leuda toda la masa? Limpiaos de la vieja levadura, para que seáis una nueva masa, como sois sin levadura; porque Cristo, nuestro Cordero pascual, ha sido sacrificado. Así que celebremos la fiesta, no con la vieja levadura, ni con la levadura de malicia y de maldad, sino con pan sin levadura, de sinceridad y de verdad. Os he escrito por carta que no os asociéis con fornicarios. No me refiero en forma absoluta a los que de este mundo son fornicarios, avaros, estafadores o idólatras, pues en tal caso os sería necesario salir del mundo. Pero ahora os escribo que no os asociéis con ninguno que, llamándose hermano, sea fornicario, avaro, idólatra, calumniador, borracho o estafador. Con tal persona ni aun comáis. Pues, ¿por qué tengo yo que juzgar a los que están afuera? ¿No juzgáis a los que están adentro? Pues a los que están afuera Dios los juzgará. Pero quitad al malvado de entre vosotros.

INSTRUCCIONES EN CUANTO A PERSONAS DESORDENADAS EN LA IGLESIA

La Iglesia en Tesalónica tenía personas perezosas que no trabajarían. Estas personas tuvieron que ser tratatadas en una manera distinta de las que eran inmorales sexuales. Personas inmorales tuvieron que ser ¨entregadas a Satanás¨ o ¨quitadas.¨ Personas perezosas deberían de ser aisladas. Deberíamos de ¨apartarnos¨ de ellas.

Considere estas Escrituras:

(2 Tesalonicenses 3:6-14) Sin embargo, os mandamos, hermanos, en el nombre de nuestro Señor Jesucristo, que os apartéis de todo hermano que ande desordenadamente y no conforme a la doctrina que recibieron de parte nuestra. Vosotros mismos sabéis de qué manera debéis imitarnos, porque no hemos vivido desordenadamente entre vosotros, ni hemos comido de balde el pan de nadie. Más bien, trabajamos arduamente hasta la fatiga, de noche y de día, para no ser gravosos a ninguno de vosotros; no porque no tuviésemos autoridad, sino para daros en nuestras personas un ejemplo a imitar. Aún estando con vosotros os amonestábamos así: que si alguno no quiere trabajar, tampoco coma. Porque hemos oído que algunos andan desordenadamente entre vosotros, sin trabajar en nada, sino entrometiéndose en lo ajeno. A los tales les ordenamos y les exhortamos en el Señor Jesucristo que trabajando sosegadamente coman su propio pan. Y vosotros, hermanos, no os canséis de hacer el bien. Si alguno no obedece nuestra palabra por carta, a ése señaladlo y no tengáis trato con él, para que le dé vergüenza.

INSTRUCCIONES GENERALES

(Romanos 13:10) El amor no hace mal al prójimo; así que el amor es el cumplimiento de la ley.

(Gálatas 6:1-2) Hermanos, en caso de que alguien se encuentre enredado en alguna transgresión, vosotros que sois espirituales, restaurad al tal con espíritu de mansedumbre, considerándote a ti mismo, no sea que tú también seas tentado. Sobrellevad los unos las cargas de los otros y de esta manera cumpliréis la ley de Cristo.

(1 Tesalonicenses 5:14 -15) Hermanos, también os exhortamos a que amonestéis a los desordenados, a que alentéis a los de poco ánimo, a que deis apoyo a los débiles, y a que tengáis paciencia hacia todos. Mirad que nadie devuelva a otro mal por mal; en cambio, procurad siempre lo bueno los unos para los otros y para con todos.

(Romanos 14:19 ) Así que, sigamos lo que contribuye a la paz y a la mutua edificación.

(Filipenses 2:14 ) Hacedlo todo sin murmuraciones y contiendas,